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{mosimage}Obras de 17 artistas integran la muestra «Encuentros» abierta en la galería Luz y Oficios el reciente 13 de enero. Según palabras de la curadora Suzzete Rodríguez Rodríguez, «a través de su análisis socio-cultural y mediante sus energías creativas han expresado estéticamente su época y realidad circundante; convirtiendo su trabajo en un producto de valor permanente, que a través de los siglos, declarará, para la posteridad, un período determinado que cobrará sentido emocional, estético e intelectual por medio de la interacción creador-espectador».

 

La apertura del año expositivo 2009 en la Galería provincial Luz y Oficios de la ciudad tuvo el feliz Encuentro de reunir a varios de los más importantes artistas jóvenes del arte contemporáneo cubano. La polisemia que entraña la palabra Encuentro en esta ocasión tuvo sus significante especial ya que quiso el azar que se encontraran con la galería la curadora Suzzete Rodríguez, que acudía a su primer encuentro con ella, sin embargo, muchos de los artistas se reencontraron con los salones de la institución y entre ellos mismos. Esta recurrencia de Encuentros propició lógicamente varios encontronazos que pudieron salvarse gracias a la buena energía que entre todos surgió. La muestra estará expuesta hasta la primera semana del mes de febrero y es una oportunidad única de disfrutar el potencial contemporáneo en su más actual factura.

Lic. Ana Ofelia González Serret
Dtra. Galeria Luz y Oficios

Con una audaz locuacidad fue develada la policrómica muestra plástica:

Cuando en La crítica del gusto, Galvano de la Volpe manifiesta: «¿Qué puede haber más románticamente individualista que la rebelión-evasión (exótica) de Gauguin? ¿Qué más históricamente burgués que estas actitudes? Pero es un hecho que la pintura de Gauguin queda, como queda la de Van Gogh, y así sucesivamente, y quedan también, para utilizar en una nueva poética figurativa, realista, algunas de sus conquistas técnicas, por ejemplo, el  sentido antirrenacentista del espacio pictórico, como se presenta ya en las obras del Picasso comunista, de Léger, del primer Pignon y Gutusso»,  Galvano de la Volpe está dándonos un quid, que es, también, el quid de esta exposición colectiva: lo más importante que conecta a los 17 pintores ponentes, en este 13 de Enero del 2009 en la Galería de Luz y Oficios, es ser contemporáneos y reflejar su momento histórico.
Pero dentro de la diafanidad, lo diverso, dentro de lo actual, lo no improvisado, dentro de cada perfil, la singularidad. Así la multiplicidad de técnicas pictóricas, avaladas por las complejidades específicas de cada pintor, no permiten hacer juicios esquemáticos sobre planteos teóricos y creacionales estrechos, sino que el diapasón se abre en grado considerable ante una realidad objetiva o subjetiva que se capta, no para introyectarse, sino para proyectarse al hombre contemporáneo y a nuestra época.
Reflejar nuestro entorno, asociado o disociado se relaciona con la gradación de intensidades de este retablo de pintores, y aquí lo matérico, lo abstracto de velada figuración, el sentido erótico de lo frutal, las temáticas de la emigración y la incomunicación, el cuerpo texturizado por la enfermedad y la enajenación, lo extra-sensorial, la transparencia, lo fractal, la fragmentación, lo anómalo, la liberación del inconsciente encima del soporte, la cromaticidad, la espiritualidad, la utopía urbanística, los bloques gráficos.
Como la lista de pintores es larga, hemos hablado, no de nombres,  sino de condicionantes y características, que le permitirán identificar a cada autor de acuerdo a cada obra. Ellos en la predominante tendencia figurativa de los espacios variables de tiempo en la pintura cubana, ellos rompiendo fronteras, ellos en la preciosa búsqueda de la belleza. Como diría Sartre en Tintoreto el secuestrado de Venecia, «Cuántas veces no he oído decir “El Tintoreto, ¡bah!, es cine”, Y sin embargo nadie en el mundo, ni antes ni después de él, ha llevado tan lejos la pasión de la búsqueda».
Pues este grupo de artistas, en la pasión de la búsqueda, lo cognoscitivo, y para decirlo en frase de Umberto Eco, «éste es y otros fermentos», mantienen el alto nivel de la exposición que ofrece, también, jerarquía de novedad, de fé de vida, de riqueza espiritual. Y junto con Theo, el hermano de Van Gogh, recibimos con sus obras, el mensaje que el gran pintor le escribió profundamente: «Hay en la pintura algo de infinito –no puedo explicártelo así sin más- pero es algo tan admirable para la expresión de una atmósfera».
Muchas gracias por el «algo de infinito» que posee esta exposición.

Lina De Feria
Escritora

                                 
Uno de los soportes imprescindible para sustentar la historia universal es la creación artística. Los pintores: Maykel Herrera, Roberto González, Enrique Báster, Kadir López, Héctor Frank, Asiyadé Ruiz, José Luis Díaz, Kelvin López, William Hernández, Harry Sam, Alain Pino, Enrique Wong, José Vincench, Jesús Nodarse, Raciel Gómez, Jorge Luis Santos, Franklin Álvarez, a través de su análisis socio-cultural y mediante sus energías creativas han expresado estéticamente su época y realidad circundante; convirtiendo su trabajo en un producto de valor permanente, que a través de los siglos, declarará, para la posteridad, un período determinado que cobrará sentido emocional, estético e intelectual por medio de la interacción creador-espectador. Esta simbiosis involucra al observador tocando sus sentidos, gustos y sentimientos formándose una fusión hombre-hombre como género, transformándola por consiguiente en un mensaje a la humanidad.


Lic. Suzzete Rodríguez
Curadora


Redacción Opus Habana