Aún cuando el Primer Festival Internacional de Música Antigua Esteban Salas haya concluido, dos nuevos talleres sesionarán del 10 al 12 de febrero próximos: los de viola da gamba y de violín barroco.
Los participantes tendrán la posibilidad de usar réplicas de esos instrumentos históricos que, gracias al Conjunto de Música Antigua Ars Longa, regresan al entorno sonoro luego de varios siglos.

 Como en el resto de los talleres, la matrícula de las clases magistrales de viola de gamba y violín barroco está abierta para estudiantes de Escuelas de Nivel Medio o del ISA —en este caso de violoncello y violín moderno—, quienes tendrán la posibilidad de utilizar réplicas de aquellos instrumentos históricos: seis ejemplares de viola da gamba y dos de violín barroco pertenecientes al Conjunto de Música Antigua Ars Longa (Oficina del Historiador de la Ciudad).
La viola da gamba ha sido rescatada para el público cubano por esta agrupación, que dirigen Teresa Paz y Aland López, los cuales han organizado el primer taller que sobre ese instrumento histórico se realiza en la Isla.
Ejecutada sobre las piernas —de ahí su nombre (gamba es pierna en italiano)—, la viola de gamba es un instrumento de cuerda frotada (o de arco) que aparece en Italia en el siglo XV y desempeña un papel preponderante en la música barroca, donde interviene como solista y como bajo armónico junto a otros instrumentos de continuo: el violone (también de cuerda frotada), el arpa, la tiorba y la guitarra (de cuerda pulsada), el bajón (de viento), el clavecín y el órgano (teclado)...
 A diferencia de la familia de los violines —que se denominan con nombres propios: violín, viola, violoncello y contrabajo— , en las violas la nomenclatura se establece a partir de la tesitura de los instrumentos: soprano, alto, tenor y bajo. Así, Ars Longa posee una viola tenor, cuatro bajos y recién ha adquirido una gamba soprano, primer instrumento de este tipo que hay en Cuba.
Impartirán dichos talleres el prestigioso gambista italiano Andrea de Carlo y la violinista Paula Waisman, integrantes del Ensemble Elyma y quienes participaron en el concierto Fiesta Criolla que clausuró el Festival el pasado sábado 8 en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís.
Bajo la conducción de Gabriel Garrido (director de Elyma), se unieron ese reconocido Ensemble y Ars Longa —junto al Ensemble Vocal Luna— para reconstruir una celebración barroca en honor de la Virgen de Guadalupe.
En cuanto al taller de instrumentos de viento —que se realiza por tercera ocasión en Cuba—, estuvo a cargo de la profesora Judith Pacquier, especialista en corneto y flautas dulces que ya había asistido a la segunda jornada Esteban Salas, antecedente del recién concluido Primer Festival Internacional homónimo, realizado en conmemoración del bicentenario de la muerte del genial compositor cubano del siglo XVIII.

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