En el 2015 se celebrará el 290 aniversario del natalicio de Esteban Salas, el más antiguo de los músicos cubanos de los que se conservan partituras, por lo que se desarrollarán un grupo de acciones encaminadas a socializar su opera omnia. A propósito, se entrevista a la Dra. Miriam Escudero, directora del Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas, cuya tesis doctoral sobre este compositor recibiera en el 2010 la distinción Cum laude de la Universidad de Valladolid y el Premio Nacional de Investigación de la Academia de Ciencias de Cuba.

«Después del estudio y la publicación de estos ocho volúmenes y de 15 años de investigación, es posible tener una idea completa de cuál es el valor de su creación musical y cómo se sitúa como el primer músico conocido en Cuba por sus composiciones, pero con el derecho de ser considerado un artista».

En el 2015 se celebrará el 290 aniversario del natalicio de Esteban Salas, el más antiguo de los músicos cubanos de los que se conservan partituras, por lo que se desarrollarán un grupo de acciones encaminadas a socializar su opera omnia. A propósito, se entrevista a la Dra. Miriam Escudero, directora del Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas, cuya tesis doctoral sobre este compositor recibiera en el 2010 la distinción Cum laude de la Universidad de Valladolid y el Premio Nacional de Investigación de la Academia de Ciencias de Cuba.

¿Quién fue Esteban Salas?
Estevan de Jesús de Salas [y Castro] de Montes de Oca fue un músico que nació en La Habana el 25 de diciembre de 1725. En recientes investigaciones se ha localizado gran cantidad de documentación relativa a su familia, sus hermanos, las condiciones de su nacimiento (fruto de un parto gemelar), entre otros datos hasta ahora desconocidos y que serán la base para un artículo que publicaré próximamente en la Revista Opus Habana. Formó parte de una familia numerosa y fue el cuarto en la sucesión de ocho hermanos, todos hijos de Doña Petrona de Montes de Oca, natural de La Habana, y de Don Thomás Antonio de Salas y Castro,  oriundo de la isla de Tenerife, España.
Su infancia debió de haberse desenvuelto en un lugar cercano a la Iglesia de El Santo Cristo del Buen Viaje porque allí se conservan las actas de nacimiento de todos los hermanos y las actas de defunción de los padres. Mitad canario y mitad habanero, Salas adquirió su formación musical en la Parroquial Mayor de La Habana, donde fue niño cantor (según refiere en su testamento), y debe haber consolidado su conocimiento con los maestros de capilla que por entonces regían la música de este templo.
Salas se formó en la Real y Pontificia Universidad de San Gerónimo de La Habana, donde estudió Filosofía, Teología y Derecho Canónico y paralelamente ejercía labores centradas en la música de la Iglesia Mayor de La Habana, lo cual debió de haber hecho muy bien, cuando a los treinta y ocho años de edad fue nombrado de facto maestro de capilla de la Catedral de Santiago de Cuba, por el entonces Obispo de La Habana, Pedro Agustín Morell de Santa Cruz.
La vida de Salas cambió. Se mudó de La Habana a Santiago y la mayor cantidad de documentos que hacen alusión a este músico, partituras, actas capitulares, correspondencia, corresponden precisamente con su estancia en esa segunda ciudad. Esto no significa que no haya llevado consigo composiciones realizadas en La Habana, pero no se ha podido determinar cuáles son aquellas probablemente escritas en un lugar u otro. Lo cierto es que ya en el año 1769 obtuvo oficialmente el título de maestro de capilla, labor que ejerció hasta el 14 de julio de 1803 cuando falleció.

Después de 15 años estudiando la opera omnia de Esteban Salas, la cual ha sido publicada íntegramente en ocho tomos, ¿cuál usted considera que es el legado de este compositor para el patrimonio musical cubano?
Esteban Salas es el primer músico del cual se conservan partituras en Cuba, lo cual no quiere decir que sea el primer compositor cubano, sino que quiso el azar que fueran sus obras las más antiguas. Esta es la razón histórica; sin embargo, hay también una razón estética, porque sus composiciones constituyen obras magistrales hechas por un hombre que dominaba el arte de la composición. A través de su obra se pueden apreciar las dos facetas más importantes de la música en el siglo XVIII: la dedicada al culto litúrgico, es decir, aquella creada en latín, expresión de un barroco tardío, y, por otra parte, los villancicos, música escrita en lengua vernácula, más abierta a innovaciones.  
Después del estudio y la publicación de estos ocho volúmenes y de 15 años de investigación, es posible tener una idea completa de cuál es el valor de su creación musical y cómo se sitúa como el primer músico conocido en Cuba por sus composiciones, pero con el derecho de ser considerado un artista. Antes del año 2001, cuando se publica el primer tomo de la colección, apenas había unas ocho obras publicadas de Salas de 106 que aparecieron después, existiendo un contraste notable de documentos de referencia. Ahora es posible estudiarla, llegar a criterios, no solamente míos, sino de otros investigadores, agrupaciones musicales que deseen interpretarlo, y es precisamente eso lo que dará justo valor a su obra.

¿Cómo influyó el vínculo entre investigación e interpretación en la gestión de la obra de Esteban Salas?  
Mi vínculo con el Conjunto de Música Antigua Ars Longa fue fundamental para poder probar que la relación entre musicólogos e intérpretes es posible. Dicha unión fue un laboratorio a partir del cual localizaba, catalogaba, trascribía y analizaba las obras de Salas. Ars Longa las montaba teniendo en cuenta los criterios que podíamos discutir de acuerdo con el contexto y con las posibilidades de interpretación de cada una de esas obras. Incluso, pude tocar con ellos, sentir la música desde adentro y no como espectador. Ese es un privilegio que normalmente los musicólogos no tienen y que ofrece una visión muchísimo más rica y profunda de la obra estudiada. Finalmente, este trabajo conjunto propició la grabación de 3 discos.
El Coro Exaudi, bajo la dirección de la maestra Maria Felicia Pérez, también había tenido una experiencia similar y, antes que ellos, en el año 1959, se grabaron los dos primeros villancicos de Salas. Después, el coro Madrigalista, bajo la dirección de Miguel García, grabó un disco integral del compositor cubano y en el año 1975 (como homenaje al 250 aniversario de su natalicio) se le dedicó un festival de coro en Matanzas. Esto evidencia que nuestros antecesores también se preocuparon por salvaguardar el legado de Esteban Salas, especialmente el intelectual Alejo Carpentier, el compositor y pedagogo Hilario González y el musicólogo Pablo Hernández Balaguer. De este último tomé la mayor cantidad de datos y la metodología de trabajo, la cual inició con la localización de la documentación y aún continúa con la socialización de los resultados a través de conciertos y grabaciones.

¿Cómo se replica la experiencia acumulada en la gestión de las obras de este compositor en el Gabinete de Patrimonio Musical que lleva su nombre?
El 2012, cuando surgió el Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas, no representó el inicio de una experiencia novedosa, sino la concreción de una práctica que se había ido acumulando durante 15 años trabajando con el Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana y la Universidad de Valladolid. Entonces, me planteé la necesidad de dedicar todas las fuerzas al rescate del más antiguo patrimonio musical cubano, pero no solamente el del siglo XVIII, sino todo el patrimonio musical documental del período colonial. No solamente hablo de mí, sino también del equipo de trabajo con el cual he compartido labores de investigación, me refiero a Claudia Fallarero, Franchesca Perdigón, Iránea Silva, Lliliam Pérez, Margarita del Carmen Pearce e Indira Marrero.
En cuanto a la docencia, el Gabinete de Patrimonio Musical Esteban Salas coordina junto al Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana postgrados relacionados con el patrimonio musical. El pasado lunes 12 de enero, por ejemplo, comenzó la V edición del Diplomado en Patrimonio Musical Hispano y el primer postgrado para profesores de escuelas de arte en Historiografía Musical, dentro de los que se prevén cursos de Patrimonio Musical Contemporáneo de Latinoamérica y Fuentes Patrimoniales de la Música en Hispanoamérica. La mayor sorpresa que tuvimos a finales del año 2014 fue la aprobación de la Maestría en Gestión del Patrimonio Histórico-Documental de la Música dada por el Ministerio de Educación Superior, que será el gran colofón de toda esta acumulación de saberes y de vinculación con otros profesionales que harán posible que el estudio de los documentos sobre música pueda ser una gestión profesional.
En el campo de Esteban Salas, es importante resaltar que no hubiese sido posible la publicación de su opera omnia, ni de sus grabaciones, sin el concurso de varias instituciones. En primer lugar de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, el Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana, la Universidad de Valladolid en España y Le Couvent, le chemins du Barroque.

¿Qué acciones se desarrollarán a lo largo de este año a propósito del 290 aniversario del natalicio de Esteban Salas, el cual se conmemorará el 25 de diciembre venidero?
Me parece una iniciativa magnífica que mañana, 17 de enero, el Conjunto de Música Antigua Ars Longa de inicio a este año conmemorativo con un concierto en la Iglesia de Paula. Será apenas el inicio de un conjunto de actividades, conciertos, talleres y conferencias alrededor de la obra de Esteban Salas que se realizarán durante todo el 2015.
Para enriquecer la opera omnia sonora de este compositor, he propuesto al sello Colibrí la grabación de un CD-DVD, similar a los dedicados a Cayetano Pagueras y Juan París, como parte de la colección “Documentos sonoros del patrimonio cubano”. Para ello hemos seleccionado obras inéditas que no se han grabado antes, así como un audiovisual explicando el contexto histórico y los valores de la creación musical de Salas, de manera tal que ese material didáctico pueda ser utilizado en las escuelas de artes y por otros tipos de público. Además, creo que es importante preparar un artículo con información concerniente a los últimos descubrimientos relativos a este compositor. Igualmente, se prevé la organización de un concierto el 25 de diciembre de 2015 a manera de conclusión de los festejos por los 290 años de su natalicio. Espero que a estas iniciativas se sumen las de otras instituciones cubanas que sientan la responsabilidad de difundir la obra de Esteban Salas, el más antiguo de los músicos cubanos.

Pablo A. Suárez Marrero,
estudiante del Colegio Universitario San Gerónimo de La Habana.

 

Escribir un comentario


Código de seguridad
Refescar