El libro La Habana Deco, publicado en 2003, está estructurado en cuatro capítulos y cuenta con más de 200 fotografías. Es un volumen que «propone un inusual viaje por la mítica y fascinante Habana deco», constatable en sitios, espacios y objetos variados.
 Esta tarde quedó inaugurada en la galería de arte del Palacio de Lombillo la exposición «Santos y señas», del pintor, escenógrafo y diseñador Alfredo Sánchez Iglesias (Santiago de Cuba, 1967). Sus pinturas, que remedan el arte bizantino, denotan la «delicadeza de su oficio», al decir del Historiador de la Ciudad, Eusebio Leal Spengler, en la apertura de la primera muestra personal en suelo habanero de este artista.
 En el parque Madre Teresa de Calcuta, en el Convento de San Francisco de Asís, puede apreciarse la instalación La mesa del silencio, realizada por el ceramista Carlos Alberto Rodríguez Pérez.
 Un discurso de profundo contenido humanista trasluce en la obra de Maikel Herrera, artista que además de haber pintado diversas series, se ha apropiado de las posibilidades expresivas que ofrece el performance.