Interesado en revalorizar la impronta dejada por la cultura irlandesa en Cuba, el hotel Palacio O’Farrill se inspira en el recuerdo de la familia que habitó esta mansión neoclásica.
 Junto a las Actas Capitulares del Ayuntamiento de La Habana, se conservan varias limpiezas de sangre. Con tales documentos las familias probaban su ascendencia, desprovistas de mezclas de raza, herejes o penitenciados, lo que les servía para avalar sus peticiones de títulos de nobleza.
 El Archivo de la Oficina del Historiador de la Ciudad atesora una colección de marquillas cigarreras y de tabaco de mediados del siglo XIX, principios del XX y de la actualidad.
 Tres ejemplares de la colección de cobres coloniales que atesora el Museo de la Ciudad, fueron reproducidos en una emisión postal de indudable valor artístico, dándole a la colección una justa difusión.